Ver Bélgica - Alemania - Holanda Road Trip, octubre 2013 en un mapa más grande
En cada uno de los sitios donde hemos dormido, he enganchado la crónica del día, a la que le he añadido alguna foto (no muchas, ni Álex ni yo llevábamos cámara), así como la información que recordaba sobre sitios donde hemos comido y dormido.
Los números gordos:
- Hemos recorrido unos 1.250km en 8 días.
- Hemos gastado unos 75 litros de diésel.
- Hemos dormido en 7 hoteles distintos: sólo hemos repetido en Aachen.
- Hemos visitado 9 ciudades distintas y un parque natural, sin contar las ciudades donde hemos pernoctado..
- Hemos gastado menos de 100€ por persona y día, todo incluído.
- Hemos utilizado tres apps para Android, fundamentales: CoPilot (GPS), ibis y hoteles.com (alojamiento ambas).
Y a título personal:
Era la primera vez que viajaba con poco más que un esquema previo de dónde queríamos ir y qué queríamos hacer, sin tener el alojamiento buscado. Ha sido una experiencia muy buena, poder ir decidiendo en cada momento dónde ir o qué hacer, sin tener la obligación de parar en un sitio o en otro.
Creo que parte de esta buena experiencia ha sido basarnos en la idea de: "No tenemos prisa; si no da tiempo hoy, ya iremos mañana". Ha hecho todo mucho más agradable y distendido, sin nervios, agobios, y sí con mucho relax. Si llovía, nos metíamos en un museo. Si salía el sol, salíamos a dar una vuelta. Y así todo el viaje.
Era la primera vez que me iba de viaje con Álex y ha salido muy bien. Nos hemos reído mucho, y si no discutimos el día de Maastricht, creo que podremos irnos a otro viaje sin miedo a terminar de bronca. Probablemente repitamos.
La zona del Ruhr sigue tan bonita como siempre, y su gente tan amigable. Hemos tenido experiencias muy buenas en todos los hoteles en los que hemos estado, donde todo el mundo se ha portado genial. Cabe destacar un café que nos tomamos en Bonn, donde la camarera, muy educaba ella, me preguntó en alemán que de dónde éramos, que mi acento no era de por allí. Una cachonda.
He disfrutado más de los hoteles que no era cadenas. No sólo por lo inesperado de la habitación, también porque eran mucho más cálidos, en general. En el Ibis o en el Holiday Inn sabes lo que te espera, y es todo muy frío y muy eficaz. Si volviera a hacer otro viaje así, creo que me decantaría por buscar más hoteles locales que grandes cadenas, aunque estas son siempre un buen recurso de última hora, excepto cuando es la feria del año, ya sabéis.
Hasta las próximas crónicas.
Creo que parte de esta buena experiencia ha sido basarnos en la idea de: "No tenemos prisa; si no da tiempo hoy, ya iremos mañana". Ha hecho todo mucho más agradable y distendido, sin nervios, agobios, y sí con mucho relax. Si llovía, nos metíamos en un museo. Si salía el sol, salíamos a dar una vuelta. Y así todo el viaje.
Era la primera vez que me iba de viaje con Álex y ha salido muy bien. Nos hemos reído mucho, y si no discutimos el día de Maastricht, creo que podremos irnos a otro viaje sin miedo a terminar de bronca. Probablemente repitamos.
La zona del Ruhr sigue tan bonita como siempre, y su gente tan amigable. Hemos tenido experiencias muy buenas en todos los hoteles en los que hemos estado, donde todo el mundo se ha portado genial. Cabe destacar un café que nos tomamos en Bonn, donde la camarera, muy educaba ella, me preguntó en alemán que de dónde éramos, que mi acento no era de por allí. Una cachonda.
He disfrutado más de los hoteles que no era cadenas. No sólo por lo inesperado de la habitación, también porque eran mucho más cálidos, en general. En el Ibis o en el Holiday Inn sabes lo que te espera, y es todo muy frío y muy eficaz. Si volviera a hacer otro viaje así, creo que me decantaría por buscar más hoteles locales que grandes cadenas, aunque estas son siempre un buen recurso de última hora, excepto cuando es la feria del año, ya sabéis.
Hasta las próximas crónicas.