Me gustaría empezar aportando la definición de la palabra servicio. La RAE no aporta mucho en sus primeras definiciones porque dice:
servicio.
(Del lat. servitium).
1. m. Acción y efecto de servir.
servir.
(Del lat. servire).
1. intr. Estar al servicio de alguien. U. t. c. tr.
Hay que ir a buscar la definición exacta de servicio público para encontrar que dice lo siguiente:
~ público.
1. m. Der. Actividad llevada a cabo por la Administración o, bajo un cierto control y regulación de esta, por una organización, especializada o no, y destinada a satisfacer necesidades de la colectividad. Servicios públicos de transporte. Servicios públicos sanitarios.
Por tanto, para que se ofrezca un servicio público es necesario que primero surja la necesidad. La pregunta entonces sería ¿existía esa necesidad? Mi respuesta es rotunda: sí, es necesario una regulación del estacionamiento dado que el parque móvil en España está creciendo por encima del aparcamiento existente en los cascos históricos; además, a esta problemática se le suma la tendencia actual de configurar los Planes Generales de Ordenación Urbana con una separación estricta de usos, con lo que el transporte ha adquirido una importancia más allá del mero lujo de ser poseedor de un coche. El transporte público, lejos de crecer al mismo ritmo que las ciudades suele llegar entre 2 y 4 años tarde, estar implantado de manera poco eficiente, entrando siempre en competencia sin posibilidad de victoria con el transporte privado, y una serie de carencias más que concluyen en que la única alternativa para un grupo de gente alto sea el uso del vehículo privado.
El problema ha sido la manera de implantar dicho servicio, con un trasfondo pecuniario que no ha satisfecho las necesidades de aparcamiento y, sin embargo, ha encarecido la vida del madrileño medio. ¿Realmente la solución era que los coches que vengan del exterior del barrio no puedan aparcar? ¿El problema del aparcamiento en un barrio residencial se maximiza en las horas que van de las 8.00 a las 20.00? Porque después de las 20.00 se acaba la vigencia de zonas verdes y azules, para pasar a ser de estacionamiento libre.
Aún sin hacer ningún tipo de estudio de movilidad, la respuesta intuitiva es que las zonas residenciales puras (como son Fuencarral, Carabanchel u Hortaleza) se vacían en esas 12 horas, ya que la mayor parte de la gente no puede trabajar en ellas; por tanto no resuelve el problema de aparcamiento y genera un problema mucho mayor para la gente que tiene el trabajo en esos barrios pero no es considerada residente de los mismos. Por tanto, la medida adoptada por el Ayuntamiento de Madrid no mejora las condiciones de vida de los residentes, que a partir de ahora a parte de llevarse el coche a trabajar y encontrarse con el atasco habitual, tendrán que pagar 25 euros anuales; no soluciona el problema del aparcamiento porque muchas de las personas necesitadas del servicio no pueden acceder a él, y se han de buscar ciertos subterfugios para conseguir aparcar, puesto que no es fácil mover una oficina de lugar; y los únicos resultados claros, a priori, es el engorde de las arcas municipales.
En cualquier caso, si se quiere aplicar una limitación de tiempo de estacionamiento, no es necesario, en ningún caso, la instalación de los modernos robots en los que hay que introducir hasta la matrícula para un mayor control, si no, simplemente, se pueden usar lo que en Alemania se llaman Parkscheibe, y que tienen la siguiente pinta:

Es muy fácil de usar: pones un cartel indicando el tiempo máximo de aparcamiento para no residentes; cada usuario tendrá que llevar en el coche un cartelito como el de la foto con el que indicará la hora de estacionamiento, con el riesgo de que si pasa un agente del SER y está mal puesta la hora (por ejemplo, si aparcas a las 12.30 indicas las 13.00 en el Scheibe y el agente pasa a las 12.45), la multa será de más de 3 euros. Conclusión, se regula el aparcamiento, se impide que la gente esté más de dos horas, una o las que quieran indicar (en los aeropuertos suelen tener la indicación de media hora para cuando vas a recoger a alguien), y, sobre todo, es gratis, sin ningún tipo de prejuicio para el ciudadano. Si a esto le sumas la entrega de permiso de estacionamiento para residentes sin coste alguno para el solicitante, tenemos un Servicio de Estacionamiento Regulado gratuito, más barato para la administración que se ahorra el coste de instalación del parquímetro en sí; pero, por descontado, sin ningún efecto en los fondos económicos de las arcas municipales.